Historia de una escala de bomberos de 1904
Las escalas de bomberos han alcanzado en los últimos años una sofisticación extraordinaria, y se han mostrado como un vehículo de capital importancia en los rescates de personas, de forma que, en la actualidad, resulten imprescindibles en los Servicios de Extinción de Incendios. Pero la historia de las escalas de bomberos se remonta a muchos años atrás, y en este caso, hablamos de una en concreto, hablamos de una, adquirida por el Ayuntamiento de Toledo, a principios del siglo pasado.
En el año 1903 se aprobó en Ayuntamiento de Toledo la adquisición de una "escala de salvamento" par el servicio de incendios. En las páginas 185 y 195 del libro de actas correspondiente al periodo que va desde octubre de 1902 a noviembre de 1903, aparece consignada la propuesta del gasto y la aprobación del mismo.
Libro de actas del Ayto.Toledo . Octubre 1902-noviembre 1903, p. 195 y 196, Comunicación del Arquitecto sobre adquisición de material de incendios (Archivo Municipal de Toledo)
La transcripción del acuerdo es la siguiente:
“Comunicación del Señor Arquitecto Municipal sobre adquisición de material para incendios. Después se dio cuenta de una comunicación del Señor Arquitecto Municipal, proponiendo la adquisición de una escalera de salvamento para el servicio de incendios. opinando se debe elegirse [sic] de una altura de diez y seis metros en tres partes y con frenos automáticos, modelo A II, del catálogo que acompaña, siendo conveniente también que adquiriera tres escalas de ganchos modelo tres mil ochocientos uno de dicho catálogo, cuyos precios en fábrica figuran en el mismo, advirtiendo que como éste material procede de fábricas extranjeras será preciso tener en cuenta el tipo de cambio, derechos de aduanas y demás gastos necesarios para su conducción a esta ciudad. El Señor Presidente manifiesta que el precio de la escala indicada por el Sr. Arquitecto es de dos mil francos, y el de las de ganchos de cuatro metros y cincuenta centímetros, treinta y cuatro francos, veinte céntimos cada una y no existe consignación más que de dos mil quinientas pesetas, con lo que no habrá suficiente para la adquisición de dichos aparatos, teniendo en cuenta el importe de los cambios y derechos de aduana y gastos de transportes. El Señor Solas propone que se adquieran los aparatos indicados con cargo a la consignación que existe y si no fuera suficiente retirar la cantidad necesaria del capítulo de imprevistos. El Excmo. Ayuntamiento acordó la adquisición de la escala y demás aparatos contra incendios indicados por el perito titular con cargo al capítulo correspondiente del presupuesto, aplicando la cantidad que falta al de imprevistos, si para ello no existiese la consignación suficiente”.
La escala se adquirió y debió estar en funcionamiento en el servicio de extinción de incendios, aunque no conocemos durante cuanto tiempo. En todo caso, con el paso del tiempo se olvidó qué había sido de ella, y como sucede con el resto de equipos y materiales históricos de los bomberos de Toledo, se había dado por perdida
La suerte quiso que el 12 de abril de 2002, apareciera durante unos trabajos de limpieza de un almacén del cementerio municipal. El encargado del mismo, se puso en contacto con la jefatura del parque de bomberos para informar que se estaban realizando obras en el almacén mencionado y que había aparecido una escala muy antigua, que podía haber pertenecido al cuerpo de bomberos. Cuando el Oficial del servicio visitó el lugar comprobó inmediatamente que se trataba de la misma escala que aparecía en una fotografía publicada en un libro sobre fotografías de la Casa Rodríguez (Imágenes de un siglo. Fotografías de la Casa Rodríguez), en la que podemos ver a los bomberos haciendo maniobras o una exhibición en el antiguo paseo del miradero, en fecha desconocida.
Escala antigua, marca Magirus, de los Bomberos de Toledo
Esta escala es el único elemento material de la historia de los Bomberos de Toledo que se ha conservado a lo largo del tiempo, y por lo tanto tiene gran relevancia y emotividad. Debido a que había permanecido durante los últimos 25 años en dicho almacén, olvidada bajo cantidad de basura, la escala presenta un inmejorable estado de conservación, para los años que tiene
Inmediatamente decidí recuperarla, ya que sería el único elemento material de la historia de nuestro parque que se habría conservado a lo largo del tiempo, y por lo tanto, de gran relevancia y emotividad para los Bomberos de Toledo. Debido a que había permanecido durante probablemente los últimos 25 años en dicho almacén, olvidada bajo gran cantidad de basura, la escala presenta una inmejorable conservación, y decidí intentar documentar la historia de la escala a la vez que procedemos a su restauración.
La escala, de 3 ruedas y tres tramos de escalera, presenta una serie de leyendas que resultan realmente interesantes y esclarecedoras para seguir su pista. En cada uno de los laterales, en un larguero horizontal aparece la leyenda “ C.D. MAGIRUS ULM A/G”, y en otro inclinado “ECHELLE-MAGIRUS”. Al mismo tiempo, en el soporte del primer tramo figura otra leyenda “AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE TOLEDO”. Evidentemente las 2 primeras inscripciones son marcas inequívocas que nos remiten a la casa comercial que vendió la escala “Magirus”, y la tercera se trata de la marca que fue grabada por el Ayuntamiento de Toledo, tras haberla adquirido.
Con el fin de iniciar la documentación solicitamos información mediante un correo electrónico, el 23 de abril, a la casa Iveco-Magirus. Entretanto esperábamos la respuesta, me empecé a documentar sobre la historia de la casa Magirus, comprobando que las iniciales C.D. hacían referencia al nombre del fundador de la empresa Conrad Dietrich Magirus, nacido el 21 –9-1824, y que fundó la empresa en 1864. La siguiente palabra ULM, hacía referencia a la ciudad donde el anterior fundó su empresa, y en la cual se encontraba la fábrica.
El mismo día que habíamos cursado la petición de información a la casa Iveco Magirus, recibimos un correo a nombre de Clauspeter Kreuzer, solicitándonos nuestra dirección para remitirnos la información solicitada. Unos días después, el 3 de mayo, el mismo nos proporciona la sorpresa del contenido de la información que nos iba a remitir. Tras consultar sus archivos, nos informaban de que nuestra escala pertenecía al modelo “EII” del que se fabricaron 300 unidades entre los años 1898 a 1936, correspondiendo nuestro ejemplar “Toledo” al número 59, consistente de un conjunto de 3 tramos con una altitud de subida de 16 m., fue encargada el 28 de diciembre de 1903, y entregada el 8 de marzo de 1904
Aunque, al parecer, algunas personas del Ayuntamiento tenían conocimiento de la existencia de la escala, y del lugar dónde se encontraba la misma, en la actualidad (abril 2002) se desconocía su existencia por parte de la Jefatura del Parque de Bomberos, lo que realmente significaba que estaba totalmente perdida.
Solamente la “intuición” del gerente del cementerio municipal hizo que éste, ante las próximas obras que se iban a realizar en los almacenes que se encuentran en dicho centro, se pusiese en contacto con la Jefatura del Parque de bomberos el día 12 de abril del año 2002, para comunicar que en sus almacenes había una escala que nos podía interesar ya que iban a proceder a la limpieza del lugar y a deshacerse de los materiales de deshecho.
Inmediatamente me dirigí al lugar, y los trabajadores del cementerio me la enseñaron, comprobando inmediatamente que se trataba de la misma escala que aparece en la fotografía del libro “Imágenes de un siglo. Fotografías de la casa Rodríguez”, en la que bomberos de la época aparecen haciendo una demostración en el Miradero, con la escala totalmente desplegada y uno de ellos se encuentra de pie en el último tramo con los brazos en cruz.
Mostré mi interés a los trabajadores y quedé con el gerente para recogerla. El día 15 de abril de 2002 nos pusimos manos a la obra para sacar la escala de su encierro. Nos habían facilitado el trabajo al despejar la escala de las basuras que la cubrían. Mediante un tractor y la ayuda de trabajadores del cementerio conseguimos sacarla del almacén. Con un vehículo del parque de bomberos procedimos a remolcarla. Una patrulla de la Policía Local, nos escoltó, facilitándonos el traslado.
A la entrada al Parque de bomberos fue recibida por todos los efectivos de guardia del turno 3 y el resto de personal. Descubrimos que junto a la marca Magirus, de uno de los travesaños, había otra inscripción que no podía leerse y en otro travesaño, también había un letrero Magirus, con otra serie de letras indescifrables de momento. Se observó que en el lado derecho presentaba otra leyenda “Ayuntamiento Constitucional de Toledo”.
El día 16 se inició la limpieza, apareciendo nuevas inscripciones. Las mismas leyendas de la marca aparecidas en el lateral izquierdo se repetían en el lateral derecho, y con la humedad del agua se pudieron leer todas las leyendas “ECHELLE-MAGIRUS” con letras que pudieron ser blancas con sombra, en uno de los travesaños inclinados, y C.D. MAGIRUS ULM A/D.
La escala, a pesar de que presentaba algunos desperfectos en la madera, se encontraba en muy buen estado de conservación. Presentaba varias manos de pintura y el color original pudo haber sido rojo carruaje, con los herrajes en negro. Las palancas de los mecanismos que levantaban la escala y los que la desplegaban han desaparecido y faltaban algunas herramientas que debió llevar en algún soporte. Algunas piezas (pocas) faltan.
Según han informado algunas personas, la escala llevaba alrededor de 25 años en el almacén del cementerio. Al parecer, algunos bomberos antiguos conocían su existencia debido a que durante algún tiempo se guardó el brazo articulado en el mismo lugar. Sin embargo, ningún bombero actual recordaba haber trabajado con dicha escala. Sí recuerdan algunas personas que dicha escala fue utilizada por otros servicios del ayuntamiento para realizar trabajos (obras). Tal vez siguió el mismo camino que en la actualidad llevan algunos vehículos desechados en el parque de bomberos, que son aprovechados por el servicio de obras para otras tareas. Al parecer, también estuvo durante algún tiempo en los edificios de Gerardo lobo que hoy son juzgados.
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