Españoles, "Franco, ha vuelto"

Jamás habría pensado que llegaríamos a este punto. Me parecía tan evidente (me parece), desde sus primeros momentos, que lo que decían era un remedo actualizado de las propuestas de Fuerza Nueva y del Franquismo, ahora pasadas por el tamiz del populismo y el trumpismo; que los tenía por una broma pesada de la historia, que se quedaría en anécdota.

Creía que mis compatriotas, a pesar de la evidente merma global en la capacidad crítica, tendrían las suficientes entendederas para comprender que apoyar ciertas cosas va en contra de sus intereses, y de las libertades suyas y de todos. Por eso pensaba que sólo bastaba con ignorarlos, que se desearían como un azucarillo.

Evidentemente me he equivocado, han obtenido apoyos y poder (algo para mí incomprensible), hasta el punto de presentarse a estas elecciones sin máscara alguna. Ahí está su programa electoral. Una enmienda a la totalidad, una vuelta sin trampa a los años grises del franquismo. Lo que está claro es que han puesto las cartas sobre la mesa; nadie podrá decir que no sabían lo que votaban, que no entendieron el programa, que no lo leyeron (aunque habrá muchos que no lo echarán ni siquiera un vistazo, y algunos serán incapaces de entender lo que proponen).

Casi cincuenta años después de la desaparición del dictador, algunos españoles parece que se han olvidado de lo que fue el franquismo y la extrema derecha, y otros se aproximan, coquetean, o lo admiten con la excusa de que no lo han conocido, pero nunca han abierto un libro de história para enterarse de algo tan importante en su mundo, y, en consecuencia, no han tenido un pensamiento que apunte algo de inteligencia mínimamente compleja, porque si no, no se entiende que muchos parezcan dispuestos a arrojarnos de nuevo al pozo del oscurantismo.

¡En fin! Esto empieza a darme miedo.